Madre de uno de los terroristas del 11-S asegura que su hijo está vivo
Después de 15 años de los atentados del 11 de septiembre en Estados Unidos perpetrados por miembros del Al Qaeda y donde murieron cerca de tres mil personas, la madre de uno de los terroristas suicidas asegura que su hijo está vivo.
Bozaina Mohamed Mustafa habló por primera vez con un medio tras el hecho. Su hijo es Mohamed Atta uno de los terroristas islámicos que organizaron y ejecutaron el secuestro de uno de los aviones que provocaron los atentados del World Trade Center.
Mohamed Atta había sido entrenado como piloto de aviación y fue quien tomó el control del vuelo 77 de American Airlines que se estrelló contra una de las torres.
"Está vivo y éste es el mensaje que le envío a mi hijo. Creo que está en Guantánamo. Hijo, quiero verte antes de morir. Ya tengo 74 anos y vivo con la esperanza de que has sobrevivido. Sé que nunca hiciste nada malo y que jamás podrías hacer eso que van diciendo por ahí. Estoy esperando tu regreso. Ellos (Estados Unidos) están ocultando la verdad", aseguró al diario "El Mundo".
Además, señala que su hijo fue víctima de un complot y que Estados Unidos diseñó el atentado para culpar al Islam.
"La última vez que lo vi fue un mes antes del 11 de septiembre. Había viajado a Estados Unidos. Es una persona muy amable y tierna. Jamás ha militado en partido político alguno. Es imposible que hiciera eso que le atribuyen", argumenta su madre.
También, asegura que la inteligencia egipcia le pidió que avise si sabía algo nuevo de él.
Respecto a las miles de personas que murieron en los ataques, Bozaina enfatizó: "No pienso pedir disculpas a las víctimas porque nunca han demostrado que mi hijo fuera culpable y jamás podrán hacerlo".
ATENTADOS DEL 11-S
La mañana del 11 de septiembre de 2001 un Boeing 767 de American Airlines se estrelló entre los pisos 93 y 99 de la Torre Norte del World Trade Center, 8 minutos después, un avión idéntico y de la misma compañía impactó entre las plantas 77 a 85 de la Torre Sur, provocando que ambos rascacielos se derrumbaran en las dos horas siguientes.
El tercer avión secuestrado pertenecía al vuelo 77 de American Airlines y fue empleado para ser impactado contra una de las fachadas del Pentágono, en Virginia.
El cuarto avión, perteneciente al vuelo 93 de United Airlines, no alcanzó ningún objetivo y se estrelló en campo abierto, cerca de Shanksville, en Pensilvania. Su objetivo era el Capitolio de los Estados Unidos, ubicado en Washington.
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