La historia de "Moca" y el "Pancho", los perros que no han podido ser adoptados por su discapacidad

Cuando en 2014 lo atropellaron, el diagnóstico fue desalentador. El perro bautizado "Moca" perdió la movilidad de la parte posterior de su cuerpo. Sin un dueño conocido, una mujer decidió llevarlo a un centro veterinario. Había poco qué hacer. Lo operaron, pero nunca pudo recuperarse del impacto. Tampoco hubo nunca quien quisiera llevarlo a su casa, menos alguien que tuviera las condiciones adecuadas para hacerlo.

Han pasado los años y hoy, su historia es otra. Moca es uno de los tantos perros rescatados por la fundación Stuka, que acoge aquellas mascotas abandonadas por sus dueños, y promueve desde su experiencia la tenencia responsable.

Junto a otro de los integrantes de Stuka, Moca, y Pancho, otro perro que fue atacado al nacer y perdió una de sus patas, apoyarán la recolección de recursos para la Teletón, en un stand donde además, harán visible un problema que ocurre con muchos animales discapacitados, la mayoría a causa de atropellos vehiculares.

¿Se puede adoptar un perro con discapacidad?

Moca tiene dos años y medio y según la fundación Stuka, puede ser sujeto de adopción, "aunque esto es bastante improbable". Primero porque tienen necesidades especiales, y por tanto es difícil encontrarles una familia idónea, y segundo porque son pocos los interesados.

 Tanto Pancho como Moca estarán junto a la fundación con banderines incentivando especialmente la donación de recursos para la Teletón. La cita con ellos es el sábado a mediodía .Estarán en aldea "El Secreto" (San Lucas 230, Lo Barnechea).