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J Balvin y Copano triunfan con honores en noche de cierre del Festival de Viña

  • Por Meganoticias

J Balvin tenía la misión de cerrar el Festival de Viña del Mar con una fiesta. Logró durante 45 minutos mantener al público de la Quinta Vergara de pie, bailando y cantando.

Viña se sacó un paso. O varios. Ginza, Safari y Sin Compromiso. Canciones que convirtieron este escenario viñamarino en carrete universitario. Miles de jóvenes gozando y disfrutando de un show, a momentos, demasiado perfecto.

40 minutos de show y el colombiano se ganó su primera gaviota de plata. Luego de un remix de Sorry, original de Justin Bieber, la fiesta siguió haciendo gozar a la Quinta.

Luego vino Ay Vamos, la favorita del público (y de Alexis), siendo uno de los momentos cumbre de la presentación. Argumento suficiente para llevarse la Gaviota de Oro y satisfacer al monstruo.

Paréntesis para el comidillo de este domingo: Maluma no estuvo presente en el show de Balvin.

Llegó el momento de Fabrizio Copano y hacer reír con una de las rutinas más inteligentes (y fálicas) del certamen. Una comedia que usó un recurso ausente hasta el momento: ironía, sarcasmo y crítica social.

Se hizo cargo de los colegios, de la educación y la televisión. Una de las rutinas más efectivas. Una carcajada estridente, por lo menos, cada un minuto.

Haciendo burla de sí mismo, y de su experiencia como invitado a Viña del Mar. Rápido, certero y con anécdotas personales que no tardaron en conectar con el público.

Mientras avanzaba su show, Fabrizio Copano se le notaba cómo disfrutaba mientras percibía la gran recepción del Monstruo. No lo podía creer, literalmente.

Copano se arriesgó con una rutina controvertida, pero efectiva. Hizo algo que no se veía hace rato sobre el escenario de la Quinta Vergara: interactuar con el público

Después de esta enérgica presentación, fue el turno de Lali Espósito, quien triunfó apenas salió al escenario, haciendo olvidar a J rápidamente con impresionantes recursos vocales.

Con un show dedicado a adolescentes, la miembro del jurado deslumbró y con una performance que mezcló canto y danza, sumado a un llamativo juego visual y de luces.