Golden Retriever perdió sus cuatro patas por brutal maltrato y ahora es un perro de terapia
"Chi Chi" es una perra Golden Retriever que realiza labores de terapia en centros de ayuda para adultos mayores y niños. Su misión es motivar a los pacientes contagiándolos con su alegría para desarrollar la interacción y activar la motricidad de personas con enfermedades físicas y mentales.
Pese a que "Chi Chi" es una perra feliz, su pasado esconde un terrible drama. Perdió sus cuarto patas producto de un grave maltrato sufrido en Corea del Sur, donde fue abandonada por sus dueños y arrojada a la calle en una bolsa de basura.
La perra fue encontrada en un mercado de carne de perros, por lo que todo indica que su destino era el mismo que miles de animales reclutados para ser vendidos en restaurantes. La Golden Retriever tenía sus cuatro patas casi cercenadas al ser amarrada con alambres y estuvo a punto de ser sacrificada por sus lesiones.
Un grupo de rescate decidió darle una nueva oportunidad, pero "Chi Chi" debía perder sus cuatro extremidades. Pese a este episodio, su vida dio un vuelco favorable. Fue adoptada por una familia de Arizona en Estados Unidos, y fue sometida a adiestramiento para ser una perra de terapia.
Según indica el diario Washington Post, los dueños del animal decidieron bautizarla como "Chi Chi", en honor al orador motivacional australiano, Nick Vujicic, que nació sin sus extremidades.
"Chi Chi" estuvo en terapia para acostumbrarse a sus nuevas prótesis. Según su nueva dueña, Elizabeth Howell, al principio el animal no quiso interactuar con los humanos, producto de años de maltrato que marcaron su vida, pero todo eso cambió con el cariño de su nuevo hogar.
"Ha sido increíble verla crecer y ver cómo se ha transformado en un animal ansioso por conocer gente nueva... Los perros pueden llegar a una persona de una manera que los humanos no pueden", dice la mujer que le dio una nueva vida a "Chi Chi".
