"Gracias por favor concedido": Placas instaladas en tumba de Nibaldo Villegas sorprenden a su familia
"Él decía: 'La gente cuando muere no desaparece, uno se transforma en energía', y la energía de mi hermano es positiva, por eso la gente le pide cosas, y gracias a Dios les está cumpliendo. Se lo agradecen a mi hermano por ese tipo de nexo que debe tener con Dios".
Así, Leandro Villegas, hermano del profesor asesinado en Villa Alemana en agosto de 2018, Nibaldo Villegas, se refirió respecto de las dos placas de agradecimientos por "favores concedidos" que durante los últimos días aparecieron en la tumba de la víctima.
Pese a que Villegas admite sorpresa al interior de la familia tras el conocimiento del hecho, rápidamente marca la distancia de ese sentimiento respecto al de extrañeza. Para él y sus cercanos se trata de algo esperable, dada las características de su hermano.
"La gente cree en él. Mi hermano hizo el bien y por lo que se ve sigue haciendo el bien (...) fue un aporte a la sociedad, entonces se entiende que la gente tenga esa confianza y se agradece que coloquen las placas en su tumba", expresó Leandro Villegas a Ahora Noticias, en el marco de la jornada de alegatos de cierre del juicio oral en contra de los imputados, Johanna Hernández y Francisco Silva.
Yendo incluso más allá, Villegas sostiene que, al menos para él, su hermano es un santo, aunque, según dice, el propio Nibaldo rechazaría esa idea: "Si estuviera aquí al lado me diría: 'Yo no soy santo, soy una persona como todos ustedes, gente de bien'. Porque la mayoría de la gente que está en Chile y el mundo es gente de bien. Son muy pocas las personas que quieren hacer el daño. Él no aceptaría (lo de santo), porque se considera una persona normal como todos".
Respecto al juicio oral que se comenzará a desarrollar durante los próximos meses, en donde se determinará el futuro de Hernández y Silva, Leandro Villegas reiteró la esperanza de la familia en que la condena no sea inferior al presidio perpetuo calificado para ambos. En este sentido, señala, van por buen camino.
"Tenemos una tarea que mi hermano nos dejó: Que estos asesinos sean condenados como corresponde y esa es la coraza que tenemos todos nosotros, de repente nos quebramos porque es muy fuerte, pero es la tarea que tenemos y hasta el momento se está haciendo como corresponde, la gente que está a cargo de las investigaciones ha hecho el trabajo como debe ser, sin dejar un cabo suelto que sirva a los delincuentes. Ahora solamente esperamos que sea la condena que estamos esperando", concluyó.
