Ubilla tras audiencia por tierras indígenas: "Es un problema ético, no hay transgresión a la norma"
¿Qué pasó?
El subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla, habló tras la audiencia en el Juzgado de Letras de Pucón por la querella en su contra por la compra de terrenos indígenas en el año 2009.
“Este es un problema ético”
Al salir del tribunal, Ubilla declaró: “En un Estado de Derecho es la justicia es la que resuelve y yo estoy tranquilo porque estas parcelas fueron compradas a una persona no indígena al igual como lo hicieron todas las personas que compraron, porque no fui el único que compró en este loteo”.
“Este es un problema ético, aquí no hay transgresión a ninguna norma, yo he actuado siempre con la verdad y he sido transparente, por lo cual es la justicia es la que debe resolver”, agregó.
Ausencia de la parte querellante
Ante la ausencia de dos de los cinco querellantes, el tribunal fijó una nueva fecha de audiencia para el 24 de junio a las 11:30 horas. Ante esta situación, el subsecretario del Interior expuso: “Lamento profundamente y me parece atípico que dos de los demandantes no hayan aparecido.Si este es un tema que ellos relevan con la importancia que han dicho, deben estar presentes”.
“Es una señal clara que aquí se está utilizando un mecanismo con intereses y con fines distintos. Es la justicia, en un Estado de Derecho son los magistrados quienes deben dirimir y resolver estas diferencias”, expuso.
Lo relevante de la denuncia
Según consignó el sitio Interferencia, Ubilla posee una casa de veraneo en la comunidad Mariano Millahual, sector de Quetroleufu, a unos 13 kilómetros de Pucón.
La polémica se origina porque la ley prohíbe la venta de terrenos a quienes no sean mapuche para evitar la división del territorio perteneciente a este pueblo originario.
El predio abarcaría 10 mil metros cuadrados donde se ubica una casa con vista a la zona de Quetroleufu.
En 2014, el militante de Renovación Nacional aportó estos dos terrenos de 5 mil metros cuadrados por un valor que supera los $5 millones cada uno a la Sociedad de Inversiones Quetroleufu Limitada, con giro para realizar inversiones. Los socios son su esposa y sus cuatro hijos.
Dichos predios fueron adquiridos en 2009 a Guadalupe Moris, quien los obtuvo fruto de la liquidación de su sociedad conyugal con Jorge Painaquir en 2008.
Uno de los aspectos llamativos de la compraventa fue que estaba exenta del pago de contribuciones. Otro punto es que los predios no podían cambiar su uso, según el Decreto Ley 3.516 de 1980, destinado a proteger los terrenos rurales.
Además se señala que las propiedades están libres de figuras jurídicas que “pudieran afectar o limitar el derecho de dominio o las facultades de uso, goce o disposición sobre la propiedad. Las partes declaran que el cumplimiento de esta cláusula es elemento determinante en la celebración del contrato prometido”.
